Los niveles de azúcar en sangre vuelven a la normalidad
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Cuando el cuerpo procesa el alcohol, deja de mantener niveles adecuados de azúcar en sangre de manera eficiente. Además de interrumpir el acceso del cuerpo a las reservas de glucosa, disminuye la eficacia de la insulina, la hormona que regula los niveles de glucosa en sangre. Esto conduce a niveles de azúcar en sangre totalmente fuera de control, lo que con el tiempo puede provocar diabetes tipo II. Los niveles de azúcar en sangre generalmente vuelven a la normalidad cuando el alcohol ya no es un factor; en los estudios, han disminuido hasta en un 16%.
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